Cuando te has ido (Los Rodríguez)

La mejor manera de animarse a base de melancolía con un ritmo y un estilo intransferibles.

Goles valencianistas desde larga distancia

Celebrar un gol de tu equipo desde el centro del campo (anotarlos ya resulta más complicado) siempre supone una descarga de adrenalina espectacular, no sólo por la fuerza que se imprime en la acción sino también por la plasticidad del resultado.
Suena paradójico que esta suerte se conozca como gol de Pelé, teniendo en cuenta que el astro carioca no consumó su intento con la diana.
Sin embargo, en este texto nos vamos a centrar en goles valencianistas desde los aledaños del círculo central, aunque no esté de más una somera contextualización basada en otros protagonistas.
En este aspecto, mi infancia y pubertad vieron el gol del por entonces madridista Aragón al FCB en la Supercopa, los que Hagi metió con RMCF y FCB (aquel disparo envuelto en la niebla contra el Celta de Vigo), uno de Simeone en pretemporada con el SFC o el prodigio técnico de un Iván Ania que estaba llamado a altas cotas. Más tarde llegaría Roger para convertirse en un especialista en la faceta. No me he olvidado del gol de Mikel Lasa al SFC, con la pelota adentrándose al trote cochinero en la meta hispalense. Todo un ejemplo de que no hacía falta ser un superclase para golear desde el centro del campo.
Dejando al margen la sana envidia que estos tantos me crearon, recopilo mis recuerdos al respecto y me percato de que la aportación del VCF a este capítulo es sustanciosa.
Nuestro primer gol de esta factura que recuerdo se lo metió Fernando a Osasuna en 1989, ya desde el campo rival y con alguna facilidad por parte del guardameta. Luego llegaría una época marcada por el auténtico especialista en estas lides: Pedja Mijatovic.
En la pretemporada 93-94 el montenegrino avisó de lo que era capaz endosándole su primer gol desde el centro del campo al SFC en el torneo 80 Aniversario de San Mamés. Marco incomparable y victoria valencianista contra los leones en la final, con otro esplendoroso gol de Mijatovic, esta vez con una de aquellas faltas desde la frontal del área que tanto le gustaban. Su bautizo oficial desde la larga distancia llegaría durante la campaña oficial y lo sufrió el Logroñés en plena crisis deportiva gestionada por Héctor Núñez. El broche de oro a su trilogía de zurriagazos con el VCF lo puso Mijatovic en la siguiente pretemporada. La víctima fue Stanley Menzo, portero del PSV Eindhoven, en las semifinales de aquel Joan Gamper en el que a Paco Roig le impusieron la insignia de oro y brillantes en el Camp Nou, una imagen contranatura a tenor de algunas de las declaraciones que jalonaron su mandato.
Los irregulares comienzos de Claudio López arribaron a posteriori como complicada transición de la era post-Mijatovic, pero en su primera temporada Piojo nos grabó en la retina un gol desde el centro del campo que hacía atisbar a Molina que su pesadilla particular estaba empezando.
Finalmente, nadie mejor que un delantero del nivel de David Villa para cerrar un recuento de goles brillantes con su zapatazo en Riazor, doblemente satisfactorio por su belleza y por volver a ponernos en disposición de asestarle al Deportivo de La Coruña otro de esos knock-outs que tanto hemos intercambiado en los últimos 15 años.
Sirva este acopio de goles en la memoria como recordatorio de tantos tantos disfrutados y aperitivo de los que nos quedan.
Y de Mijatovic, quedémonos con la colección de golazos que dejó para la posteridad.
Como lo narró Picornell bajo la espesa lluvia madrileña: Pren carrereta, llança... col-locat...gooooool!

El crimen de Cuenca

El que suscribe estas líneas ni es crítico de cine ni un especialista en el campo del celuloide. No obstante, de vez en cuando hablaré de algunas de las películas que más me han gustado, obviamente sin ningún afán de pontificar.
Empiezo, un poco al azar, por un título que habla por sí mismo.
Este filme de Pilar Miró resultó bastante polémico, no sólo por la crudeza de algunas de sus imágenes y por mostrar las vergüenzas y miserias de la España atrasada y caciquil de principios del siglo XX sino también por haberse estrenado en 1979, en el marco de los años más decisivos de la Transición. Ambientada en el pueblo castellano de Osa de la Vega, muestra un granado catálogo de personajes de la época (agentes del orden, políticos, funcionarios, etc.), a los que retrata sin tener piedad de sus defectos y arbitrariedades. Las escenas de torturas no tienen prácticamente parangón en el cine español y estremecen sobremanera, como una manera de recordarnos lo intolerantes que hemos de ser con esa práctica que tan extendida ha estado durante años entre algunos de los encargados de la seguridad del Estado.
Una historia basada en hechos reales, con imprescindibles pinceladas costumbristas que nos retrotraen a un país que queda descolgado de cualquier tipo de evolución a la altura de los tiempos, y al fin y al cabo, una ejemplificante historia de ignorancia e injusticia.

Moonlight Shadow (Mike Oldfield)

Nada mejor un domingo por la tarde que rememorar con una de mis canciones favoritas la épica de un sábado por la noche cualquiera, aunque la habitación esté desordenada y se atisbe una semana repleta de actividades.

Futbolistes de la meua infantea

Tal volta tinc idealisats els primer noranta i eixos vuitanta dels quals no tinc pràcticament memòria en primera persona per lo que respecta al futbol. El cas és que a lo millor no significaren tampoc una arcàdia balompèdica (i no parle ara del Dream Team), però conceptes com la professionalitat, l´amor al club o el sacrifici i el compromís tenien llavors una rellevància que és complicat trobar a dia de hui en un futbol tan mercantilisat i captiu d´unes aficions que s´infantilisen i es tornen desafectes al ritme que els marquen els mass media.
També els futbolistes han canviat i es comporten més com a estreles del pop que com a treballadors d´un club. S´ha perdut el respecte als aficionats en molts sentits i ya és difícil vore el que abans anomenàvem jugadors de club. Estèticament també s´han homologat a les modes més superficials del carrer i molt llunt podem trobar ya rostres inoblidables d´eixos primers noranta que ara recordarem mitjançant alguns dels seus noms més emblemàtics.
En este recorregut per la nostàlgica futbolística topetarem en històrics calbs com Dertycia (CCF, Tenerife, Albacete), Rafa Paz (emblema sevillista), Spasic (RMCF i CAO) o Górriz (Reial Societat) i bigotuts com Lucho Flores i Aristizábal (VCF, estil guerrilla sandinista), Kowalczyk (RBB), Martínez Puig (Castelló), Viti (ROCF), Clos (FCB i Múrcia), Bastón (Burgos), Sañudo (ROCF i Rácing de Santander), Kevin Richardson, Larrañaga i Aldrige (Reial Societat), Joaquín (RSG), Zygmantovich (Ràcing de Santander), Rocha (RMCF) o Abadía (CDL). Millor encara és recordar als que complementaven les característiques anteriors com Carmelo (CCF) o Meléndez (RCDE).
Capítul apart mereixen els barbuts com Juan José (CCF i RMCF), Jiménez (RSG), Calderé (FCB i Sant Andreu) o Martín Vázquez (RMCF). Alguns, com el primer, també destacaven per les seues grenyes i en eixe aspecte hem de citar noms com Gorriarán (ROCF), Diego (SFC), Ibeas (Castelló, estil heavy metal) i l´home que ilustra este artícul, l´osasuniste Jacek Ziober.
Per a tots ells un chicotet homenage, també per a eixe futbol que ells protagonisaren i que, com la meua infantea, mai tornarà.
Gràcies pels meus millors anys com a espectador futbolístic!

Eduard Punset

Hace dos o tres días topé por casualidad con una entrevista en CNN Plus cuyo protagonista principal era Eduard Punset, uno de esos personajes que siempre tiene algo interesante que contarnos y que actúa como un auténtico estimulante de la inteligencia.
Nunca fui un seguidor de su programa Redes, lo intempestivo del horario y el cansancio mental que a menudo genera la adquisición de nuevos conocimientos complejos me desincentivaban. Aunque las ciencias naturales, las físicas y las derivadas de ellas nunca fueron mi fuerte, el énfasis y cercanía con que Punset diserta sobre ellas logra interesarme más que de costumbre por sus temáticas.
Como un torrente dialéctico fluyen sus ejemplos sobre cuestiones complejas y en el programa referido anteriormente se pudieron ver diversos casos.
En relación con la popularización de la ciencia, Punset citó la reprimenda que un editor espetó al codescubridor de la estructura del ADN Francis Crick. Un libro sobre aquel tema no podía presentarse en sociedad con un lenguaje tan científico que prácticamente nadie lo entendiera fuera del ámbito especializado. Crick preguntó si se le podía facilitar un contacto con "alguien de la calle" para que tradujera la obra. Parece que en este aspecto se ha avanzado enormemente en los últimos tiempos a juicio de nuestro protagonista.
Otros apuntes que esgrimió el catalán fueron los relativos a que el hombre conoce el futuro a través de su pasado, es decir, utilizando para vislumbrar lo venidero lo que su esquema mental recuerda del concepto en sí (por ejemplo, según él, pensando en una cama de hace 20 años para imaginar la de 2020). Tampoco pasó inadvertida la constatación de la teoría que sostiene la pervivencia de ciertas células de gran relevancia para el organismo después del fallecimiento. Para ejemplificar este descubrimiento citó una brillante pintada neoyorquina de los años sesenta que rezaba "¿Hay vida antes de la muerte?"
En resumen, escuchar o leer a Punset, aunque sea en cuentagotas como en mi caso, resulta una experiencia siempre enriquecedora, incluso para un ignorante en temas de ciencias naturales.
En otro orden de cosas, quizás los más jóvenes o los que no estén interesados en la política desconozcan la trayectoria de Eduard Punset en este ámbito.
He pensado que resultaría interesante glosarla de modo somero: Militante del PCE durante su periplo universitario en Madrid, se integró en los albores de la nueva democracia en Centristes de Catalunya-UCD, llegando a posteriori a ser nombrado Ministro de Relaciones para las Comunidades Europeas (1980-1981). Después vinieron un par de años de colaboración como independiente con CiU para acabar retornando al proyecto centrista, nucleado ahora en torno al CDS.
En todas estas formaciones ocupó Punset cargos de responsabilidad política al más alto nivel, aunque cabe mencionar finalmente la generación de un proyecto propio denominado Foro, un partido de centro liberal y regeneracionista del sistema democrático que se disolvió después de no conseguir representación en las Elecciones Europeas de 1994 en coalición con un moribundo CDS. A nivel de traslación autóctona conviene recordar que el Foro liderado por Punset apareció en prensa durante su efímera trayectoria como posible compañero de viaje del fallido proyecto Convergència Democràtica Valenciana, que hubiera coaligado a UV, CDS Valencia o PVN, entre otros. También podemos señalar en este punto la fundación del partido cosmopolita Ciudadanos por Altea por parte de Carolina Punset, hija del protagonista de este texto.
Dejando a un lado el perfil público del personaje, me enteré en el programa de que éste había superado felizmente un cáncer de pulmón, por lo que afortunadamente se le podía ver de nuevo luciendo canosas y erizadas melenas laterales al estilo Art Garfunkel.
Con tanta síntesis apresurada de datos y recuerdos se me olvidó que en la entrevista se presentó el último libro de Punset "¿Por qué somos como somos?"
Ahí es nada, un título que a priori promete.

Presentación

Hoy abro este blog dedicado a escribir sobre algunas de las cosas que me entretienen, me gustan o dan sentido a mi vida, entre otras: libros, fútbol, política, Valencia Club de Fútbol, música...
Saludos!